Era de noche, para variar. Pero era una noche despejada y demasiado calurosa para enero, quizá por eso no me di tanta importancia a mí misma y a cómo iba. Había confianza, demasiada en realidad... Y por eso sabía que algo iba a ocurrir, una corazonada que me llevaba rondando todo el día.
La cuestión era que esa noche tenía una bifurcación. La típica espinita que siempre hay en todos lados que podría derivar a dos situaciones.
Por desgracia para mí, la noche escogió el camino equivocado.
uOoO =) ME GUSTA =)
ResponderEliminar